Vivimos una crisis climática en la que nuestro país está viviendo situaciones de climatología extrema que nunca habíamos vivido: récords de temperaturas máximas, lluvias torrenciales, sequía extrema, huracanes y tormentas. El acuse de la huella de ozono se hace notar cada vez con mayor frecuencia, por lo que es necesario tomar cartas en el asunto para evitar estas situaciones. Hoy 24 de octubre se celebra el Día Internacional contra el Cambio Climático y desde Vientos de Futuro no queríamos dejar pasar la ocasión de poner en valor la importancia que tiene la energía eólica para hacer frente a la mayor lacra de nuestro tiempo.
Queremos contribuir a impulsar la energía eólica en España de una forma consensuada para lograr frenar el cambio climático y alcanzar los objetivos establecidos para 2030 en el Plan Nacional de Energía y Clima (PNIEC) aprobado por el Gobierno y ahora en revisión: duplicar la potencia instalada, llegar a un 35% de generación eléctrica mediante eólica, y sumar un 74% de la generación eléctrica a partir de fuentes renovables. Además, podremos dar respuesta al objetivo europeo de lograr la neutralidad climática en 2050.
La eólica: gran productora de energía limpia
La energía eólica es una fuente de energía renovable que no contamina, es inagotable y reduce el uso de combustibles fósiles, principal origen de las emisiones de efecto invernadero que causan el calentamiento global. Además, la energía eólica es una energía autóctona, que está disponible en la práctica totalidad del planeta, lo que contribuye a reducir las importaciones energéticas y la huella ecológica, mientras ayuda a crear riqueza y empleo de forma local.

La energía eólica no genera emisiones, ya que su combustible es la fuerza del viento: la eólica evita la emisión de 29 millones de toneladas de CO2 al año, casi las que emite el parque automovilístico español de turismos durante un año. Asimismo, evitó importaciones de combustibles fósiles por valor de 1.389 millones de euros, un factor importante teniendo en cuenta que España importa más del 95% de los combustibles fósiles que consume.
En España no existen yacimientos petrolíferos, pero podemos considerar los aerogeneradores que están en toda la geografía española como nuestros “pozos de energía verde”. De esta manera, la eólica es un pilar fundamental y aliado estratégico al que se le debe dar mayor protagonismo para lograr hacer frente al cambio climático.